• El delantero y Pol Ballesté recibieron ayer su quinta amarilla y no podrán jugar el domingo ante el Águilas F.C.

  • El equipo ha disfrutado este lunes de la primera de sus dos jornadas de descanso

La primera plantilla disfruta este lunes del primero de los dos días de descanso que les ha concedido el cuerpo técnico. Miguel Rivera quiere recompensar a sus jugadores por el enorme esfuerzo de las últimas semanas y los necesita al cien por cien en los dos partidos que restan para certificar el objetivo de la permanencia.

El Melilla acumula 42 puntos tras la victoria ante el C.S. Puertollano y tan sólo quedan 6 en juego. Ocupa la novena posición y tiene 5 puntos de ventaja sobre el puesto de promoción de descenso, que ocupa el Atlético Levante con 37, y el colchón sobre el descenso directo es idéntico, 5 puntos sobre el Mancha Real. La salvación no es matemática, pero está más cerca que nunca.

En el vestuario, sin embargo, no hay relajación y el objetivo es vencer el próximo domingo para no estar pendientes de los números. El duelo en El Rubial no se plantea asequible porque el conjunto que dirige Jovan Stankovic tiene 38 puntos y le acecha la zona de peligro. Para dicha cita, además, Rivera no podrá contar con Pol Ballesté y Rubén del Campo. Ambos tendrán que cumplir un partido de sanción por acumulación de amonestaciones.

El delantero suizo hablaba para la web del club nada más ganar al Puertollano con un gol suyo en el minuto 85 de partido. Dejaba un mensaje, que seguro comparte toda la afición: “La victoria es importante siempre, pero esta más”.

El valor de los tres puntos es crucial y más por la forma de conseguirlos, otra vez con una remontada heroica. Este equipo nunca se rinde. “No nos venimos abajo ante la adversidad, al revés, es un reto para todos nosotros”, subraya Del Campo. El estadio entró en ebullición con el tanto de la remontada. El mismo Rubén del Campo entró en éxtasis con sus compañeros. “Mi gol en este momento era muy importante -recuerda- y la celebración es para todos, destacando el esfuerzo del equipo”.

El ariete lamenta no poder jugar ante el Águilas por sanción: “Es una pena, sí, pero hay cosas que no se pueden remediar”. Suma diez goles en su cuenta, no podrá aumentarla el domingo, pero ya piensa en el partido ante el Mancha Real de la última jornada: “Siempre quiero más, hay que ser ambicioso”.