La U.D. Melilla persigue este domingo prolongar el buen momento que atraviesa en sus partidos como local y para ello deberá confirmarlo derrotando a uno de los equipos de la zona baja del grupo, el Arroyo Club Polideportivo.

Los malos resultados obtenidos por el conjunto extremeño a lo largo de la primera vuelta tuvieron como consecuencia el cese del entrenador. El espectacular trabajo de Juan Marrero al mando de le nave extremeña fue cortado hace varios meses.

El ex entrenador del  Cartagena, José Francisco Grao, ‘Pato’, tomó las riendas del equipo. Desde su llegada, el Arroyo tiene un balance en catorce partidos disputados de 6 derrotas, 4 empates y curiosamente todos los encuentros disputados en el mes de marzo, excepto el del Cádiz con el que empató, los saldó con 4 victorias consecutivas que hicieron respirar al conjunto arlequinado.

El conjunto arroyano se sitúa en decimoquinto lugar con 38 puntos, empatado a puntos con La Roda, que se encuentra en promoción de descenso, y con el San Fernando, que está situado en puestos de descenso.

El Arroyo está mostrando dos caras bien diferenciadas: una positiva cuando juega como local (campo de césped artificial de dimensiones muy reducidas) y otra negativa cuando lo hace de visitante.

Pato dispone del clásico 1-4-4-2 ó 1-4-2-3-1 dependiendo del partido y de las circunstancias del choque. Se trata de un equipo muy disciplinado, experto, aguerrido, trabajador y en el que el bloque está por encima de cualquier individualidad. Le gusta presionar arriba, evitando la salida de balón fácil del adversario, aunque una vez superada esa línea, repliega con rapidez. En la zona de tres cuartos y ataque posee futbolistas con velocidad y movilidad. El Arroyo saca mucho partido de las jugadas de estrategia, sobre todo cuando juega como local.

El conjunto arroyano está teniendo serios problemas para ver puerta. Parte de la explicación puede estar en las bajas por lesión de sus dos delanteros más importantes: Willy e Ibán Espadas, los cuales se perderán, con casi toda seguridad, todo lo que queda de campeonato.

El ex meta del Cartagena Juanma, que es el meta titular durante toda la campaña está sancionado, por lo que le sustituirá Christian, que solamente ha disputado los minutos del partido pasado frente al Guadalajara, cuando entró sustituyendo a un lesionado Juanma en el minuto 43.

El lateral derecho titular en los últimos encuentros es José Gutiérrez que le ha ganado el puesto a Manu. El ex de La Roda y Cacereño, Santi Polo defiende y actúa por el lateral zurdo del equipo. Cumplidor como el que más, siempre está dispuesto para ayudar al equipo.

El centro de la zaga lo ocupan Owona y Castaño. El primero destaca por su potencia y contundencia, además de ser un especialista en el juego aéreo. El segundo ejerce de jefe de la defensa y saca el balón desde atrás con criterio. El otro zaguero recién llegado en enero, José Rodríguez, está entrando en el equipo en las últimas semanas, por lo que también guarda opciones de salir de inicio.

El ex astigitano Iván Moya y Bayón son los dos mediocentros con más posibilidades de salir de inicio. Son dos centrocampistas de  guardar más la posición y de ayudas constantes a los centrales cuando el juego lo permite. También podría entrar Juanma Morán que aporta más recorrido y llegada desde segunda línea.

Los extremos derecho e izquierdo del Arroyo los vienen ocupando Ruano y Juanjo (ex Villanovense), respectivamente. Ambos son jugadores de banda puros, el primero de más desborde y velocidad; mientras que el segundo, con más capacidad para el centro y el pase. No hay que descartar la entrada del ex San Fernando Berni por cualquiera de los dos.

El ex canterano del Sevilla Juanfran está siendo una de las revelaciones del equipo, es el máximo anotador del Arroyo con 12 goles. Aporta verticalidad y remate. Tampoco es el clásico nueve, pero se entiende a la perfección con su compañero de ataque. Pato maneja otras dos opciones: la de un delantero más específico como Espinar o la inclusión de un centrocampista más como Romero o incluso la del veterano Abel Buades en la media punta para dotar de más control del juego al conjunto arlequinado.