A pesar del resultado, los unionistas plantaron cara ante el juvenil cordobés en un partido donde marcaron los pequeños detalles

Después de más de un mes, el juvenil azulino recupera la jornada 10 frente al Córdoba CF. En octubre, unos problemas técnicos en el despegue del vuelo de Melilla a Málaga provocaron el retraso de toda la planificación del juvenil melillense de cara al partido causando la suspensión del encuentro.

Finalmente, el encuentro se disputó hoy a las 11:00 en la ciudad deportiva del Córdoba CF. Las cosas cambiaron desde ese entonces, los unionistas han encontrado las primeras bases de un juego bastante decente donde puede plantar cara a los rivales y los cordobeses, situados en la 8ª plaza de la clasificación, están siguiendo la estela de la parte alta de la tabla. Previo al saque inicial se entregó una camiseta conmemorativa en homenaje a la memoria del jugador juvenil cordobés Álvaro Prieto.

El juvenil dirigido por Ali Amar presentó el siguiente: Óscar en la portería; Platón, Fran, Nico, Dani y Adams en la línea de cinco defensas; Ortega y Mauricio en el medio del campo; Pablo, Ramón y Adam forman el tridente de ataque.

Los primeros minutos del encuentro se destacó la disputa entre los dos juveniles. El juvenil califa propuso un juego de posesión tranquila mientras que los unionistas presionaban en línea para para lanzar el contraataque. Adam tuvo la oportunidad de adelantar a los unionistas tras un centro lateral pero la defensa cordobesa despejó el centro. Para el espectador neutro, el partido resultaba atractivo e intenso. En el minuto 39, cuando parecía que se iba en tablas al descanso, llegó el primer tanto de los locales por medio de Mario tras rematar un pase por banda.

El segundo tiempo comenzó con un juvenil melillense en busca de la reacción del encuentro. Comenzaron a sentirse a gustos sobre el césped y a aprovechar fases ofensivas en el área cordobesa. De hecho, Adam aprovechó un contraataque manifiesto frente al portero, pero el defensa arrolla al delantero unionista pero el colegiado no sanciona la jugada. No obstante, a causa de la fatiga del viaje y del ritmo del partido, los unionistas bajaron un poco la intensidad del encuentro a pocos minutos que acabe el final. Con ello, el juvenil blanquiverde no perdonó y sentenció el partido en el 84’ a servicio de Luis Gil tras aprovechar un despeje de los unionistas.