La UD Melilla B volvió a ganar en casa tras la derrota sufrida hace un par de semanas en La Espiguera ante el Mancha Real. Los de Felipe Sánchez cuajaron una primera mitad excelente en la que pudieron marcharse al descanso con un marcador mucho más amplio que el 2-0. Melik adelantó a los azulinos a la salida de un córner y posteriormente asistió a Sidi para que este materializara el segundo con un remate de gran factura. La sensación de superioridad era evidente y el tercero estuvo cerca de llegar ante un Atarfe que apenas inquietaba a Jesús.

En la segunda mitad fueron cambiando las tornas poco a poco. Los granadinos insistían cada vez más sobre la portería melillense, pero fue Becker el que tuvo en sus botas la sentencia. Penalti claro sobre Amin que atajó el cancerbero visitante. A partir de ahí, el equipo tuvo que remar para mantener el marcador. Llegó el 2-1 y un penalti en el descuento obligó a mantener la respiración en La Espiguera. Raúl asumió la pena máxima, pero no encontró portería. La grada respiró y los tres puntos se quedaron en casa.