El equipo de la barriada malagueña está formado en su gran mayoría  por jugadores  que superan la treintena con muchísima experiencia en esta categoría, principalmente en su línea defensiva y portería.

Al equipo entrenado por Rafael Muñoz puede ser que sus mejores momentos hayan pasado en cuanto a prestaciones físicas, pero sus experiencias  acumuladas juegan a su favor y dan continuas muestras de ello en numerosas situaciones dentro del propio juego.

El debut  en la categoría, compromiso y sentido de pertenencia con la idiosincrasia del club de todos sus componentes, hacen de El Palo un rival incómodo como ha demostrado a lo largo de toda la temporada.

Su línea defensiva de 4 compuesta por Manolo Gaspar y Oli en los laterales, con Nacho Aranda y Jesule en el eje de la zaga y el portero Mikel Pagola evitan riesgos en el inicio de su juego y tratan de jugar sobre Guerrit, su jugador referencia en la mediapunta (11 goles) y después desde el orden, ganar esa 2ª jugada para llevar el balón a sus dos volantes, Javilillo y Zamorano, que son jugadores desequilibrantes y siempre intentan el 1×1, en esto y en las acciones de balón parado radica su verdadero peligro.

En la punta del ataque jugará un joven Falu Aranda, que si bien no les está proporcionando una cifra de goles importante, su trabajo en la presión y como hombre más adelantado hacen de él un hombre importante dentro de los esquemas del técnico.

Un viejo conocido de la afición melillense, Francis Flores es uno de los jugadores que podrían ocupar alguna de las posiciones en el doble pivote, aunque ha salido recientemente de una lesión y es muy probable que no sea así.

Todo hace indicar que en la sala de máquinas del equipo paleño estén Alexis y Julio Cobos, debido a la sanción de Montero. Además de este, Igna y Salvi también están sancionados para este encuentro frente a la Unión Deportiva Melilla.