• El azulino Ruano ya ha cumplido su sanción de cuatro partidos y el próximo fin de semana podrá estar disponible para Carrión
  • “Me he tenido que comer cuatro semanas sin poder ayudar, pero ya sólo pienso en dar el máximo esta semana para poder volver a la convocatoria en Cartagena”, ha comentado

Juan Ramón Ruano ya está de vuelta. El futbolista pacense ha cumplido ya la sanción de cuatro encuentros que le impuso la Federación tras su expulsión en Copa del Rey, y este fin de semana podrá ser de la partida si así lo decide su entrenador. Para analizar su situación personal y la del equipo –que esta semana afronta un tramo muy exigente de la temporada-, el extremeño ha atendido esta mañana a la página web del club en una breve entrevista.

El de Usagre, nada más comenzar, ha asegurado estar “con muchas ganas de volver”, pues comenta que las cuatro semanas de sanción se le han hecho “un poco largas”. Admite, aun así, que le ha animado algo más que los resultados “hayan sido buenos exceptuando la semana pasada” y que los compañeros “seguían contentos”.

De hecho, al jugador unionista le dolió el doble que la sanción fuese tan dura, ya que afirma que la acción se produjo “sin ninguna intención maliciosa”. El ángulo de visión de la cámara, tapado por el banquillo, evitó que el club pudiera recurrir, aunque todo esto es ya agua pasada. “Me he tenido que comer cuatro semanas sin poder ayudar, pero ahora tan sólo pienso en dar el máximo esta semana para poder volver a la convocatoria en Cartagena”, ha asegurado Ruano.

La noticia positiva para él es que el plantel “estaba arriba cuando llegó la sanción y ahora nos seguimos encontrando arriba con una eliminatoria muy bonita por delante”. Explica que sus compañeros han estado “dando el nivel” y que actualmente existe una “buena dinámica” que intentarán mantener para conseguir “el objetivo marcado”.

El veterano extremo comenta, sin embargo, que no han de lanzarse las campanas al vuelo, pues se está viendo “mucha igualdad en el Grupo IV, que siempre es muy competitivo”. “Estamos valorando al máximo cada punto de juego, recordamos que el año pasado este equipo no se mete en playoff por un punto y fíjate el Extremadura, que por ese punto está en segundo. Cada crédito hay que valorarlo un mundo, está todo muy igualado y creo que ahora mismo las distancias no son lo suficientemente grandes. Tenemos que seguir trabajando para seguir fuertes en casa y fuera de ella”, ha significado.

Ruano (c), junto a su hijo y Brian Martín en el vestuario de la U.D. Melilla.

Para el banda unionista lo mejor de su equipo hasta la fecha es “que nunca deja de intentarlo, salgan las cosas bien o mal, tengamos un día de más acierto o no”. “Gracias a Dios –ha continuado- estamos ahora ‘con la flechita hacia arriba’ y el trabajo se está traduciendo en resultados”.

Intentará el futbolista volver a poner su grano de arena en una escuadra “en la que no somos sólo once o catorce, sino hasta 20 jugadores que estamos todo aportando”. “Ayer, por ejemplo, Braim tuvo un gesto que le honra al asistir a Óscar –ha señalado-, y yo también intentaré ayudar el tiempo que pueda estar en el campo, si estoy. Llevo todo este tiempo entrenando muy fuerte y en solitario muchas veces para intentar volver lo mejor posible, como si no hubiera pasado nada”.

Sabe Ruano que la próxima semana será terrible: viajan a Cartagena el domingo, reciben al Ontinyent en Copa el miércoles 17 y al UCAM ese mismo fin de semana, pero el pacense conoce bien el camino del éxito:

“Tenemos que seguir pensando en el día a día, que es lo que me ha llevado a mí a cotas altas. Ahora mismo sólo tenemos que pensar en el Cartagena; luego llegará la Copa y luego el UCAM, y luego Jumilla. Están en la recámara pero actualmente sólo pensamos en ir a Cartagonova y jugar un partido precioso. Ayer mismo lo comentaba con algunos compañeros, que vamos a ser dos buenos rivales, pero vamos a intentar llevarnos el gato al agua y que sea el Melilla quien gane”, ha comentado.