• Los de Manolo Herrero, sin pisar el acelerador, vencieron con solvencia a un Melistar que apenas llegó al arco contrario
  • Los tantos azulinos los anotaron Mahanan, Braim y Nacho Aznar por partida doble

La Unión Deportiva Melilla ha completado esta noche, y en el Álvarez Claro, su primer encuentro de la actual pretemporada. Especialmente condicionados por la carga de trabajo de estos últimos días y lo prematuro de la cita, el encuentro no va a servir para extraer conclusiones definitivas del mismo. No calibrará tampoco el nivel real de ninguna de las dos escuadras, pero el 4-0 conseguido ante el Melistar ha valido, por lo menos, para divertir al público y rescatar algunos detalles positivos entre las nuevas incorporaciones azulinas.

El partido comenzó algo espeso, con los de Manolo Herrero intentando sentirse cómodos sobre el campo y con el Melistar jugando a nadar y guardar la ropa. Sobre todo esto último. Los primeros once hombres que saltaron al campo fueron, por parte azulina, Pedro Luis, Jilmar, Ibra, Mahanan, Ibarbia, Lolo, Borja, Pedro Vázquez, Bilal, Dani García y Yacine.

En la primera mitad, que finalizaría con un marcador de 1-0, no se observó el juego vistoso y fluido que pretende el míster implantar en su plantel, pero ya sirvió para ver sobre el campo la aguerrida intensidad de Josu Ibarbia; la pausa y calidad de Pedro Vázquez; la briega de Yacine en la punta de ataque o la ya conocida profundidad de Jilmar en el lateral entre otras cosas.

El primer tanto de esta U.D. Melilla llegaría muy cercano al ecuador de este enfrentamiento de entreno, en el minuto 40 y cuando un córner botado por Pedro Vázquez desde la banda derecha fue rematado en el segundo palo por Yacine y cazado en el primero por Mahanan, que libre de marca empujaba el balón a la red.

Nacho Aznar, en el momento de encarar al meta Jesús para poner el 3-0.

Ya en la segunda mitad, Herrero dio entrada a aquellos futbolistas que aguardaban en el banco (Dani Barrio, Pepe, Odei, Juanma Espinosa, Nando, Rubén Martínez, Braim, Nacho Aznar y Abdulah). Los únicos que permanecieron en el rectángulo de juego fueron Jilmar e Ibra, que más tarde serían sustituidos por Mahanan y Bilal.

Uno de los puntas del equipo, Braim Amar, dejó la acción de más bella factura del partido. Su gol, desde fuera del área, con la derecha y colocado en la misma escuadra del arquero rival Avellaneda, fue sin duda lo mejor del encuentro. Llegó en el minuto 55.

Apenas diez minutos más tarde, Juanma Espinosa y Nacho se inventaron otra jugada de bella factura que acabaría en gol. De una triangulación en el vértice izquierdo del área entre ambos nació un pase al hueco del talentoso jiennense, un buen control del nueve y una definición impoluta de este mismo futbolista. Era el tres a cero azulino sin apenas haber levantado el pie del acelerador, marcando la diferencia en el campo bastándose principalmente de la calidad técnica de sus jugadores. Aprovecharon también, cabe decirlo, el poco tiempo de rodaje del Melistar.

El momento en el que ambos equipos saltaron al terreno de juego.

El último tanto del partido, también obra de Nacho Aznar, llegaría en el minuto 69 después de un mal despeje de la zaga hoy vestida de amarilla. El delantero melillense recogió sin oposición y en el área chica un balón que no acostumbra a fallar. Y menos hablando del atacante más pillo del equipo. 4-0 y a por el siguiente, ya el domingo en Motril. Queda bastante trabajo por hacer.