• Los azulinos buscan refrendar su espectacular racha con una victoria en el campo jiennense
  • El Real Jaén llega al choque en una delicada situación extradeportiva, pero posee grandes profesionales entre sus filas

La cuenta atrás ya está en marcha. Empezando a mirar con recelo la ropa de invierno, y a falta de treinta puntos para que concluya la liga, los futbolistas azulinos enfrentan ya la apasionante recta final del campeonato. En la zona noble de la tabla las espadas están en todo lo alto, y hasta 8 equipos –la U.D. Melilla uno de ellos- van a disputarse los cuatro puestos que dan opción a jugar la liguilla de ascenso en estas diez últimas jornadas.

Los de Josu Uribe, con los deberes medio hechos, afrontan este definitivo tramo con la ilusión por las nubes, sabiendo que lo tienen todo en su mano para conseguir una ilusionante clasificación para los playoff. Para ello, y tras observar lo comprimida que está la clasificación, la escuadra melillense ha de comenzar a sumar sus puntos de tres en tres.

La primera de la diez finales que le restan al equipo norteafricano de aquí al término del campeonato se disputa mañana en el estadio de La Victoria, de Jaén, en lo que va a ser una cita nada apacible. Inmerso en una delicada situación institucional y deportiva, el Real Jaén se juega mucho más que tres puntos en este envite. Actualmente, los olivareros ocupan la antepenúltima plaza del Grupo IV y, de concretarse un descenso de categoría, es bastante probable que este histórico club tuviese que desaparecer.

Esta dramática situación en la entidad blanca, que ha llevado a su central titular Bardanca a solicitar la carta de libertad esta misma semana, puede suponer al mismo tiempo un enorme riesgo al enfrentarlos. La grada apoyará al club de sus amores, siempre lo hace, y jugadores de calidad no les faltan. Tendrá que estar muy atento e intenso el club azulino a lo largo del choque si no quiere verse sorprendido por los arreones de un Jaén que jugará este enfrentamiento como si la vida les fuese en ello.

La visita del Real Jaén al Álvarez Claro se saldó con victoria azulina en la primera vuelta (2-1).

Ya la pasada semana fue capaz de plantar cara al líder de la categoría durante más de una hora, llegando a adelantarse en el Artes Carrasco. Calidad no les falta, y hombres como Santi Villa o Sergio Molina dan buena prueba de ello. Las botas de ambos jugadores aglutinarán la mayor parte del peligro jiennense, especialmente en las acciones a balón parado.

Posee además Ramón Tejada en su plantel a otros jugadores de gran talla y sobrada experiencia, como Cifu y el veterano Óscar Quesada, que a sus 39 años sigue siendo un pulmón en este equipo. La baja de Bardanca en la zaga será posiblemente repuesta con la inclusión de Carmona, que regresa al equipo tras sanción.

Otro de los escollos a salvar por los unionistas, empezando de atrás hacia delante, será el del meta Felipe Ramos, uno de los mejores porteros de la liga. El madrileño se formó en la cantera del Real Madrid, y en 2009 quedó tercero en los Football Draft después de Sergio Asenjo y De Gea, casi nada. Todo un porterazo que ya esta temporada le ha dado algún que otro a los olivareros.

Esas son las credenciales de un histórico en apuros, un club que a principios de temporada nadie situaba entre los favoritos al descenso y que, a día de hoy, se juega el ser o no ser de una manera dramática. Enfrente tendrán al Melilla, una escuadra que este curso se ha ganado lo que tiene “por méritos propios”, según reconocía Tejada en la rueda de prensa previa al choque. Los melillenses saltarán a La Victoria con el corazón puesto la consecución del partido, que comenzará a las 12:00 horas y será arbitrado por Luis Fernando Collado López.