• El surcoreano Kiu, que cuajó de nuevo un genial partido, anotó el único tanto del encuentro.
• La gran actuación del meta Dani Barrio ayudó a elevar la racha de jornadas sin conocer la derrota hasta las once fechas

La Unión Deportiva Melilla peleó, sufrió, disfrutó, pero sobre todo, venció. En una desapacible mañana de domingo, marcada por las fuertes lluvias y el viento, los azulinos tiraron de oficio y casta para sumar los tres puntos ante un peligroso San Fernando, que lo estuvo intentando durante todo el partido. El buen hacer de la defensa azulina y el tanto de Kiu a los 14 minutos de juego fueron suficientes para sumar una meritoria victoria más, alcanzar los 42 puntos y seguir aferrado a los puestos que dan derecho a sentir la corazonada hasta final de temporada.

El choque comenzó muy favorable a los intereses de los locales, que dominaron los primeros 25 minutos de encuentro. En el minuto 3 de partido (en honor a su dorsal) la afición brindaba una calurosa ovación al lateral melillense Amarito, que actualmente pertenece a la disciplina del San Fernando y que vio in situ el encuentro entre las dos escuadras azulinas de sus amores.

Uribe, consciente de la necesidad de sumar de tres en tres para seguir en la pelea con los de arriba, había introducido una variante ofensiva en el once. Apostó por dejar al tridente que había actuado de inicio en Granada (Kiu, Santi Luque y Jairo), pero cambió al mediocentro Borja Prieto por Nacho Aznar, que actuó en la punta del ataque unionista.

Con la profundidad y desborde que aportaban los bajitos, y con un césped algo más rápido que en otros encuentros por aquello de la lluvia, se observaron los mejores momentos azulinos, los primeros. Su futbol vertical y la abnegada presión en la salida del rival son santo y seña de este equipo, y durante la primera mitad de la primera parte la U.D. Melilla exhibió sus armas.

Con una defensa sólida, protegida por Alí Diakité y Nando de la Rosa, y un ataque muy móvil activo en el pressing, caracterizado por la inteligencia, velocidad y desparpajo de sus piezas, los azulinos consiguieron noquear inicialmente al San Fernando y asestarle el que acabaría siendo el único tanto del enfrentamiento.

Una internada por la derecha en el minuto 14 del surcoreano Kiu, que ha demostrado estar en un espléndido estado de forma, acabó en las redes isleñas después de una buena definición en el mano a mano. El extremo, muy activo en ataque, gozó de alguna oportunidad más, como Nacho Aznar o Jairo, que también apretaron mucho en defensa y, fruto de esa presión, generaban bastante peligro.

No se concretó el dos a cero y el fútbol, como el césped del Álvarez Claro, se fue volviendo algo más pesado y brusco. El San Fernando, obligado por la necesidad, se hizo con el control del esférico y empezó a generar peligro, especialmente con un juego bastante directo.

En el balón parado tuvieron sus mayores amenazas, pero la excepcional actuación del Zamora del Grupo IV (Dani Barrio) evitó que se escapara punto alguno del Álvarez Claro. El arquero asturiano tuvo varias acciones de real mérito, y entre él y el palo evitaron que los visitantes pudieran rascar algo del fortín melillense.

En la segunda mitad el dominio se alternó algo más, con la salvada excepción de los últimos diez minutos, en los que la escuadra visitante metió a los melillenses en su área colgando gran multitud de balones al área contraria, intentando valerse de la superioridad corporal de sus componentes.

Finalmente, los azulinos volvieron a demostrar que son un equipo cohesionado, sensato y aguerrido, que deja toda la carne en el asador siempre. En una jornada nada aconsejable para la práctica del fútbol, con frío, lluvia y viento, la U.D. Melilla se ha sobrepuesto a los impedimentos y a un equipo exigente y descarado para alcanzar la cifra muy valiosa cifra de 42 puntos (los mismos que el cuarto clasificado, el Villanovense).

FICHA TÉCNICA