• El central considera que está cada vez más difícil sumar puntos, y que llegar a los 45 créditos en años pasados costó “Dios y ayuda” en Melilla
• El manchego cree iguales de importantes “todos los partidos de aquí a final de temporada”

El turno de hoy en la rueda de prensa ha sido para uno de los jugadores clave de la U.D. Melilla en esta temporada, el albaceteño Sergio Sánchez. El central, que hasta la pasada jornada había disputado todos los minutos jugados por el equipo, se perdió el último partido por acumulación de tarjetas.

Su sustituto en el once ante el Murcia, Richi, cuajó un sensacional encuentro ante el Murcia y ahora, ante los nazaríes y con la baja de Pepe Romero en el lateral, algunas piezas pueden bailar. A Sergio esto no le preocupa, ya que ve “muy completa” la plantilla azulina, y sabe que a quien le toque salir, sea él u otro compañero, va a rendir al mismo nivel. “Aunque entre un jugador y salga otro, no se notará en el rendimiento del equipo”, ha expresado.

Cuestionado por la dificultad e importancia del choque del domingo, que los enfrentará en Granada al peligroso filial nazarí, el zurdo considera que “importantes de aquí a final de temporada van a ser todos los partidos, porque al final los puntos que sacas son los mismos”.

Eso sí, comienza a cobrar importancia el coeficiente de goles particular entre los equipos. Hasta la fecha, eso sí, la U.D. Melilla ha ganado esta faceta a todas las escuadras a las que se ha enfrentado a doble partido (La Roda, El Ejido, Mérida, Lorca y, virtualmente, al Real Murcia). “Sí que es verdad que hay un valor añadido, el golaveraje particular, pero hasta el momento se lo tenemos vencido a todos los rivales contra los que hemos jugado”, ha señalado el defensor.

Acerca de si prefiere o no disputar el próximo enfrentamiento en el Nuevo Los Cármenes, un estadio de Primera donde normalmente actúa como local el Granada C.F., Sergio expresa que prefiere jugar “en un buen campo a hacerlo en uno de dimensiones pequeñas o artificial”.

Hablando del filial rojiblanco, reconoce que “individualmente” tienen tres o cuatro jugadores “muy rápidos y desequilibrantes”, pero que intentarán frenarlos con mucho trabajo, en la línea de compromiso y seriedad demostrada hasta ahora por los melillistas.

“A partir de ahora, conseguir puntos y victorias va a ser muy difícil porque todo el mundo quiere quedarse en la categoría, todos se juegan cosas, todos quieren estar arriba. Cuesta mucho sacar los partidos adelante y hay que valorar lo que estamos haciendo, otros años el llegar a los 45 puntos ha costado Dios y ayuda”, ha añadido el zaguero.

De hecho, el espigado defensa asegura estar “muy satisfecho” con el rendimiento del equipo, tanto en la zaga donde actúa como en la punta del ataque:

“Sabemos que arriba tenemos jugadores desequilibrantes, lo han demostrado en partidos atrás y lo van a seguir haciendo. Los nuevos han llegado con ganas e ilusión, yo particularmente estoy contento con las incorporaciones”, ha continuado.

Comenta que es “algo inevitable” que en el entorno se empiece a hablar de liguilla, “la afición tiene derecho a ilusionarse”, pero señala que en el vestuario “tienen la cabeza fría”, y que el objetivo sigue siento “llegar cuanto antes a los 45 puntos, y a partir de ahí no renunciar a nada”.