La UD Melilla no pudo pasar del empate ante un Almería B que aprovechó muy bien las pocas incursiones que realizó sobre el área de Munir. Un tanto muy tempranero les permitió adelantarse en el marcador, aunque la respuesta azulina no tardó en llegar y Chota puso poco después las tablas en el marcador. Parecía entonces que los unionistas lograrían remontar el encuentro. El mal estado del césped convirtió el choque en un duelo de ida y vuelta. Las defensas prevalecían sobre las ataques y el descanso compareció para dar aire y frenar el ritmo, por momentos, frenético del encuentro.
Los de Juan Moya salieron con ganas de solventar pronto el partido, pero fue entonces cuando Víctor comenzó su particular partido bajo palos. Evitó hasta en cuatro ocasiones el tanto melillense, y cuando los almerienses aprovecharon un despiste defensivo para volver a adelantarse a balón parado, el guardameta fue el clavo sobre el que cimentaron el punto que se acabaron llevando del