- El equipo azulino vuelve a La Espiguera para entrenar en una superficie similar a la que se encontrará el domingo en Son Malferit
- Todos los jugadores del plantel han participado en la sesión
La Unión Deportiva Melilla, después de una jornada de descanso, ha vuelto esta mañana al trabajo sobre el césped artificial de La Espiguera, superficie similar a la que se encontrará el próximo domingo en Son Malferit. Allí entrenará también mañana y pasado, justo antes de emprender su viaje (el sábado por la mañana) a Palma.
En la sesión, que ha tenido especial acento en la fuerza y lo táctico, han participado todos los futbolistas del plantel, que siguen mostrándose muy concentrados e ilusionados de cara a la difícil batalla del fin de semana.
Los de Manix Mandiola han retomado también esta mañana los entrenamientos con las bajas de Kike López y Sam Shashoua, que ya se perdió el encuentro de ida con ciertas molestias en su espalda. El central –o pivote- Villapalos, que hoy atendía a los medios al término de la sesión, comentaba a los medios que están preparando el duelo “para ganarlo dejando la portería a cero”.
Ambos equipos llegan invictos en playoff a este encuentro, pero el equipo balear necesita ganar para pasar de ronda. Cualquier empate excepto el 0-0 (se llegaría a la prórroga) daría el pase a los unionistas, que en la sesión de esta mañana han comenzado a trabajar la manera de deshacer el entramado defensivo albiazul.