• El técnico azulino ha analizado hoy la infinidad de variantes del rival, pero considera que la clave está en su vestuario

  • Continúa pendiente de jugadores con molestias y no decidirá el once hasta la mañana del domingo

Miguel Rivera afronta la recta final del que será su primer partido con la Unión Deportiva Melilla en esta segunda etapa. El domingo, tan sólo cinco días después de llegar a la ciudad, tendrá que medirse a la U.D. Alzira. Hoy ha analizado todo el potencial del contrario, pero sabe que la dificultad radica en recuperar a su vestuario. El aspecto anímico es crucial, pero también está a expensas de jugadores tocados. Y deja claro que la diferencia la marcará la afición con su apoyo.

“El factor tiempo es un tema que ahora mismo es el gran hándicap que tengo que superar. Hemos venido con toda la ilusión y sabemos que ahora mismo hay que revolver mucho la situación para encontrar soluciones, que es lo que queremos todos. Es una situación un poco compleja, pero me gustaría aprovechar este minuto para recordar a todos los aficionados que los necesitamos. Y yo tengo un principio de vida, en los momentos difíciles los seres humanos nos calificamos”, ha expresado el malagueño en rueda de prensa. A continuación, ha explicado que “sonó mi teléfono y me dijeron si quería volver, pues aquí estamos. Con esa facilidad y esa rapidez espero que ahora todos comprendamos que necesitamos la mayor unión posible porque de ello depende la Unión Deportiva Melilla y su proyecto”.

Es consciente del descontento del respetable, pero les pide que vuelvan para empujar desde la grada. “Sé que muchas veces somos críticos merecidamente, muchas veces no hacemos las cosas bien, pero ahora mismo nuestros aficionados son como los padres con sus hijos, en los momentos difíciles ya nos han dado los cocotazos necesarios y queremos también nosotros corregirnos, pero necesitamos su apoyo. Entre todos tenemos que superar al Alzira”.

“Viendo al Alzira sabemos que nos vamos a enfrentar a un buen equipo, con gente experimentada, que tiene muy bien trabajados sus conceptos. Ellos leen muy bien los partidos y les gusta salir jugando, pero si se les presiona no tienen ningún inconveniente en buscar un desplazamiento tanto una diagonal como a la espalda al espacio libre…”, ha explicado cuando se le ha preguntado por el cuadro contario.

Ha seguido explicando que “tienen después mucha movilidad en el centro del campo, juegan de dentro-fuera, de fuera-dentro, a veces utilizan el juego combinativo, tienen gente resolutiva… Bueno, todo eso lo sabemos, pero es verdad que hay que centrarse mucho en nosotros. Hemos trabajado mucho en levantar nuestro ánimo (…). No hay excusas, a trabajar, a entregarnos y a tratar de demostrarnos, que este es nuestro gran objetivo, que somos capaces”.

“Me he encontrado el típico vestuario cuando las cosas no salen, pero esto es normal. Cuando llegué a Cartagena estaban las cosas así, cuando llegué a Écija estaba así, cuando llegué a Almería estaba mucho peor, cuando llegué a Valladolid estaba mucho peor… Lo típico. Pero paralelamente hay un grupo extraordinario profesionalmente y, además, con esas ganas de también decir somos capaces”, ha descrito cuando se le ha hecho hincapié en el estado de sus jugadores.

Está hablando con ellos, tanto en grupo como de manera individual, pero extraer su mejor versión. De ello ha comentado: “No hay ningún secreto. Es sólo recordarles que han sido elegidos por un trabajo, que también hizo muy bien Manolo, para un proyecto tan importante como es representar a la Unión Deportiva Melilla, que es una ciudad autónoma y que siempre ha tenido unos proyectos y que tiene una historia extraordinaria en el mundo del fútbol español. Y cuando a ti te llama la U.D. Melilla te tienes que sentir orgulloso. Y, si te llama, es porque tienes una serie de condiciones para ser absolutamente válido para el proyecto. Hay que mirar hacia adelante y, como tenemos tiempo, corregirnos”.

Sobre el estilo de juego que desplegará el domingo ha dejado dos testimonios que definen su intención. Por un lado: “Estamos trabajando con una idea de ser capaces, si la situación nos permite, para conquistar, para ser un equipo competitivo, mucho más allá del sistema. Equipo de inicio fácil, me gusta tener la posesión del balón para atacar. Y buscar todas las combinaciones posibles para llegar y finalizar (…). Lo fácil te va a dar seguridad”. Y, en segundo lugar, ha remarcado: “Nosotros tenemos que ser ‘killers’ en el área contraria. Pero, metafóricamente, no podemos permitir que venga el ladrón, que le abramos la puerta y le digamos pasa. Por lo menos que vea que aquí hay alarmas, hay rejas, dificultad para pasar…”.

Por último, ha concluido con este argumento: “No voy a hablar de lo que ha pasado, el poco tiempo lo voy a utilizar para que nos centremos en este partido, para que nos demos una oportunidad. Sabemos que podemos mejorar”.

Sobre el posible once, no ha podido dar pistas, puesto que hay jugadores que aún no están al cien por cien físicamente y se esperará hasta la mañana del mismo domingo.

AUDIO MIGUEL RIVERA