• El insuficiente punto obtenido en la Nueva Victoria se hizo bueno con el resto de resultados de la jornada
  • El playoff se aleja a cuatro créditos, pero paradójicamente se acerca el tercer puesto, a esta misma distancia de los azulinos
  • Hoy ha vuelto el grupo al césped para preparar el choque del domingo en casa ante el Atlético Sanluqueño

La Unión Deportiva Melilla sigue asomada a los puestos de liguilla. El empate de ayer, que supo a poco en el seno del club norteafricano, se hizo relativamente bueno con el resto de resultados de la jornada en el Grupo IV. El Mérida firmó tablas en su visita a Almendralejo, mientras que Marbella y Jumilla perdieron ante rivales de la zona baja, lo que demuestra una vez más la gran igualdad reinante en la competición. Sólo queda pues, para seguir soñando con la liguilla hasta el final, ganar o ganar este próximo domingo al Atlético Sanluqueño, como ya se consiguió a domicilio en el partido de ida.

Los de Josu Uribe ocupan actualmente la sexta plaza de la clasificación con 45 puntos, a cuatro del Villanovense (que aún tiene que visitar Melilla) y a otros tantos del Marbella, que suma dos de los últimos quince créditos, cediendo su espacio en el podio al conjunto serón. Por debajo de ellos, con 46 puntos y en quinta posición, se encuentra el Mérida, que ayer raspaba en el tiempo añadido un valioso empate en el Francisco de la Hera. Por detrás del sexteto, y con 44 puntos, permanecen inmersos en la lucha por los playoff dos equipos murcianos: el Real Murcia y el Jumilla, que corrieron suerte dispar este fin de semana.

Arriba, Lorca y Cartagena siguen sumando de tres en tres y cada vez se alejan más de sus perseguidores. Se vaticina un vibrante duelo por el campeonato de liga entre estos dos colosos del grupo sureño de la 2ªB. Eso sí, los de Julio Algar parten con una ventaja de cuatro puntos sobre los albinegros.

Los azulinos tienen hambre de victorias, y esperan que el Atlético Sanluqueño «pague el pato».

Si se puede extraer algo positivo del encuentro fue de nuevo el rendimiento defensivo de la U.D. Melilla, el segundo equipo menos goleado del fútbol español. El Zamora del Grupo IV, Dani Barrio, dejó por 14ª vez a cero su portería, y la racha de encuentros sin caer derrotados sigue prolongándose. Con el tropezón de ayer del Barça, los azulinos ya son la escuadra que más tiempo lleva sin perder del balompié profesional nacional (desde el 20 de noviembre).

Todo esto, sin embargo, sigue sin ser suficiente para entrar en los puestos de privilegio. Esto ha servido, cómo no, para amarrar los 45 puntos que te aseguran la salvación a falta de nueve partidos para el final, restando27 puntos. Es ahora cuando los unionistas han de dar un paso adelante y exhibir, aún con mayor ahínco, la garra y tesón que los caracteriza.

El domingo a las 12:00 horas en el Álvarez Claro se presenta una nueva oportunidad para los melillenses. Recibirán al actual colista de la competición, un equipo que pagó la novatada del ascenso en el primer tramo de la actual temporada y que, a día de hoy, es el tercer mejor equipo de la segunda vuelta.

Ayer perdían ante el líder en un vibrante encuentro con ocasiones para ambos, pero no lo hacían desde el pasado 8 de enero, ante el Jumilla. Difícil rival en línea ascendente el que llega a Melilla, un equipo muy hábil y descarado que busca hacer a final de temporada los deberes de todo el curso. Esa necesidad jugará en contra de los azulinos, que no contarán con ningún jugador sancionado para la cita.

Trabajando desde esta mañana

Para dar un golpe en la mesa así ante un equipo tan necesitado hay que dar un extra sobre el verde, y la plantilla unionista está dispuesta y deseando hacer el esfuerzo. Ya se vio ayer en Jaén como peleó el conjunto local pese a estar agonizando en puestos de descenso, institucional y deportivamente. Por ello, los futbolistas azulinos ya están manos a la obra, y esta mañana han realizado su primer entrenamiento semanal..

Los jugadores, que llegaban la pasada medianoche a la ciudad autónoma en el Ferry Express de Balearia, podrán gozar mañana de una jornada de descanso, pero la de hoy, como todos los lunes, ha sido regenerativa o compensatoria en función del esfuerzo realizado en el enfrentamiento de ayer.